Conocida por sus fiestas nocturnas y sus magníficas playas, Ibiza es también un lugar ideal para sumergirse en la historia paseando por las callejuelas de sus cascos antiguos.
Es la mayor de las islas Pitiusas, en las Baleares, y se ha convertido en un destino muy popular desde los años 80/90, especialmente entre la jet set, que organiza allí fastuosas fiestas, y los clubes, donde se baila con los mejores DJ del mundo. Pero mucho antes de la música electrónica, Ibiza ya era una isla privilegiada para los hippies, un lugar donde defendían la ecología. Hoy en día, tienes la oportunidad de disfrutar de este legado a través de una estancia exclusiva y respetuosa con el medio ambiente, mientras disfrutas de toda la belleza de Ibiza.
Entre las playas imprescindibles se encuentran Ses Salines, considerada una de las más bellas del mundo, Cala Salada, con sus aguas cristalinas, y Cala Comte, uno de los lugares más populares de la isla.
En los restaurantes junto al mar, podrá degustar excelentes platos de marisco fresco mientras admira las vistas. Además de la cocina marinera, la gastronomía local también hereda las tradiciones campesinas con verduras fritas en aceite de oliva y salchichas típicas. La antigua presencia musulmana se refleja en numerosos pasteles de influencia bereber que utilizan albaricoques, almendras, canela y anís.
Pero Ibiza también es un destino cultural. En Eivissa, la capital, descubrirá 2600 años de historia. Es la oportunidad perfecta para descubrir el casco antiguo en lo alto (Dalt Vila) y las ruinas fenicias de Sa Caleta. A menos de 30 minutos de allí, cerca de Santa Eulària, se encuentra el mercado hippie más grande y antiguo de la isla, el Punta Arabi. Allí encontrará bonitos objetos de recuerdo.